Playas paradisíacas
alrededor del mundo
Con este calor y en pleno verano todos soñamos con lo mismo: una playa idílica en la que alejarnos de las multitudes, tumbarnos bajo las palmeras y refrescarnos en aguas cristalinas de color turquesa, incluso puede que nadar o bucear entre hermosos corales y peces exóticos.
¿Pero dónde están estas playas paradisíacas? En Sudáfrica, Omán, Maldivas, Tanzania, Nueva Zelanda, Emiratos Árabes Unidos, Sri Lanka, Polinesia Francesa, Myanmar y Estados Unidos. A continuación te las descubrimos una a una y recuerda que los sueños pueden hacerse realidad.
Playa de Nungwi en Zanzíbar: Playas de arena blanca y aguas de color turquesa que esconden magníficos arrecifes de coral, peces tropicales, rayas y tiburones ballena. Así es Zanzíbar, una isla paradisíaca ideal para los amantes del buceo. Recomendamos acudir a la playa de Nungwi al atardecer, cuando los dhows, barcos pesqueros tradicionales, salen con sus velas desplegadas a faenar y nos regalan una estampa de postal.
Atolón Rangiroa en el archipiélago Tuamotu en la Polinesia Francesa: El archipiélago Tuamotu en la Polinesia Francesa destaca por la pureza y transparencia de sus aguas y por la extraordinaria riqueza de su ecosistema marino, que es Reserva de la Biosfera por la Unesco. Incluso Jacques Cousteau describió el fondo marino de las Tuamotu como «el mayor banco de peces del mundo». Poco más podemos decir. Sí, que de las 78 islas y atolones de coral que comprende, Rangiroa es ideal para descansar bajo una esbelta palmera, hacer snorkel, emular a los protagonistas de «El lago azul», rodada aquí en los años ochenta, y degustar algún vino local.
Playa de Ngapali en Myanmar: Tres kilómetros de arena fina y dorada flanqueada por palmeras que nos arrastra hasta las prístinas aguas del Golfo de Bengala, habitadas por llamativos peces de colores. Imposible no desconectar del mundo en la playa de Ngapali, donde los más madrugadores tendrán la recompensa de ver llegar a los pescadores con sus barcas y a sus mujeres clasificando y limpiando la pesca del día.
Puerto de Trincomalee en Sri Lanka: Trincomalee es un bello puerto natural rodeado de playas paradisíacas. El mismo puerto en el que atracó Marco Polo cuando llegó por primera vez a Sri Lanka, la lágrima de la India. Aquí cada playa tiene su aliciente y rivaliza con el resto en cuanto a belleza, tranquilidad, fondo coralino, etc. Pero si Trinco, como se conoce popularmente, es una de nuestras playas favoritas es también porque cuenta con el mejor punto de observación de ballenas azules del mundo, Swami Rock.
Clifton Beaches en Cape Town en Sudáfrica: Más playas de arena blanca y aguas azules, esta vez en Sudáfrica. Clifton, conocido como el Saint Tropez de Cape Town, cuenta con cuatro maravillosas calas separadas por rocas gigantes, cada una con un ambiente distinto, aunque todas con maravillosos apartamentos en primera línea de mar y yates de millonarios flotando en el océano de color turquesa. Por el ambiente más familiar y las instalaciones y servicios de los que dispone, nos quedamos con la playa número cuatro.
Venice Beach en Los Ángeles: En la famosa Venice Beach de Los Ángeles, la playa es quizás lo que menos importa. Aquí no se viene a disfrutar de un día de relax tumbado al sol o nadando entre peces de colores, sino a sentirse parte de un espectáculo único, el de los deportistas y culturistas, los patinadores y skaters que exhiben sus habilidades enfundados en minúsculos bañadores y bikinis, los artistas locales y los turistas cámara en mano que se quedan boquiabiertos ante esta ecléctica atmósfera playera, que tantas veces hemos visto en películas norteamericanas.
Las Islas Maldivas: Si buscas aguas cálidas y transparentes para hacer snorkel y bucear, Las Maldivas son el lugar ideal. Más de mil islas coralinas en el océano Índico con una temperatura media anual de entre 29 y 32 ºC y un sinfín de exóticos animales acuáticos que habitan sus aguas turquesas como el inmenso tiburón ballena, el pez trompeta, la manta raya o la hermosa tortuga carey. El único inconveniente de Las Maldivas es que querrás quedarte para siempre.
Corniche Beach en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos): Corniche Beach es una playa impecable con palmeras, jardines, un mar de aguas turquesas y excelentes vistas de Lulu Island en el corazón de una gran ciudad como es Abu Dhabi. La playa se divide en tres ambientes: solteros y grupos de jóvenes, parejas y familias que buscan tranquilidad y familias con niños. Dispone de todos los servicios imaginables y tiene bandera azul, así que es ideal para los más urbanitas.
Zighy Bay en Omán: «La Noruega de Arabia», así se conoce la península de Musandam en la que se encuentra Zighy Bay, por sus hermosas calas, pequeños pueblos y montañas de superan los 2.000 metros de altura. Zighy Bay es propiedad privada del Six Senses Resort, pero también nos merecemos un lujo cómo este de vez en cuando y más aún en vacaciones. Podremos bucear entre arrecifes de coral, navegar en un bote tradicional, avistar delfines, ver el desove de las tortugas marinas y, el no va más, llegar al resort en paracaídas como James Bond.
Si te apetece disfrutar de lujo playero en un destino emergente antes de que se convierta en el lugar de moda, aquí tienes nuestras propuestas viajeras en Omán.
Cathedral Cove en la Isla Norte de Nueva Zelanda: Una cala a la que solo se puede llegar a pie, en barco o en kayak ya promete. Si además te contamos que el nombre de Cathedral Cove se debe al inmenso arco natural que separa dos fantásticas playas del océano Pacífico, creado a partir de una erupción volcánica y moldeado por la erosión, querrás ir seguro. Ambas playas son fantásticas para bañarse y tomar el sol y una de ellas cuenta con un pináculo de roca blanca llamado «Te Hoho», también muy fotogénico.